lunes, 14 de diciembre de 2020

Antología final

 https://drive.google.com/file/d/19md4gNK-KSuwP0ljwK6g-Llla4pEa1wx/view?usp=sharing 

Segundo cuatrimestre a partir de la pág. 35

Autoevaluación final

Dentro de un contexto adverso y en una cursada atípica, llena de distintos problemas y cuestiones poco comunes debido a la virtualidad y las complicaciones que trajo la pandemia del COVID-19, siento que el resultado fue muy positivo. Fue una cursada que empezó antes que ninguna y trajo algo de seguridad dentro de toda la incertidumbre que había en esos primeros días del año.  En las clases se generó un clima ameno de trabajo y, de la mano de lecturas de consignas y lecturas muy interesantes, siento que pude aprender cosas no solo del docente, sino a partir de las intervenciones de mis compañeros.

Si tuviera que criticar algo sobre mi participación en la cursada es que se me dificultó intervenir  en las clases ya que mi Internet no es el mejor y, casi siempre que intentaba prender la cámara o el micrófono, el Zoom se trababa o me sacaba de la reunión. Al mismo tiempo, me alegra haber completado todas las consignas y no haber sentido ese momento de escritura como algo tedioso, sino como un momento en el que podía liberar un poco la imaginación y tener la libertad de escribir sobre lo que tenga ganas.

A diferencia de otras materias, no se exigió mucho con los tiempos para terminar las consignas y fue eso también lo que generó que el momento de escritura se sienta como un momento disfrutable, en la que no lo hacía por la obligación de seguir con los tiempos pautados, sino porque verdaderamente sentía ganas de tomarme un tiempo para pensar y escribir cada consigna.

 Si bien, todo esto parece una mera formalidad, no quiero dejar de rescatar el buen trabajo en conjunto que se logró entre el docente y los estudiantes en uno de los momentos de crisis social más grande de la historia y también quiero usar este espacio para agradecer tanto a Santiago como al resto de mis compañeros por su acompañamiento desde la virtualidad y  un escape de la pandemia que me afectó muy de cerca en mi ámbito personal.

miércoles, 2 de diciembre de 2020

Aceptación a Amelia Earhart

Querida Amelia:

Me alegra que hayas vuelto a comunicarte, creo que no pudo ver el panorama más grande al que apuntaba su propuesta en la primera carta y es por eso que mi primer reacción fue rechazarla.

Comparto con tu idea de que deberíamos generar que las niñas aspiren a todo lo que deseen ser, ya sea una de nuestras princesas o una gran aviadora como vos. Al fin y al cabo, todos los niños deben ver sus sueños reflejados en nuestras animaciones. En fin, cuanto más le damos a ellos, más recibimos.

Estaría encantado de que puedas venir a nuestros estudios y podamos desarrollar bien tu idea junto a nuestro equipo creativo, estoy seguro de que Minnie estará encantada de conocerte. Y como bien has dicho, alguien tuvo que depositar su confianza en Walt para hacer todo esto realidad y nosotros estaremos muy felices si podemos hacer lo mismo con vos. 

Mickey Mouse

martes, 24 de noviembre de 2020

Lo más importante de las cosas menos importantes- Escena de lectura

Lo más importante de las cosas menos importantes

Roberto Fontanarrosa, uno de los mayores exponentes de la literatura latinoamericana, mencionó en algún momento que “el futbol que vale es el que queda en el recuerdo” y en ese mismo sentido, el 8 de diciembre de 2010 es una fecha de la que difícilmente me pueda olvidar.

Esa noche, cuando mi papá llegó de trabajar, se cambió rápidamente la camisa por la camiseta roja y emprendimos el viaje en auto hacia Avellaneda. Iba a ser la primera vez que iba a la cancha y recuerdo perfectamente cómo iba observando atentamente a la gente en los colectivos o en los autos vestida con distintos modelos de la misma camiseta, cantando, discutiendo o con el silencio de nerviosismo previo a una final.

Al llegar a Avellaneda, mi viejo estacionó el auto a unas quince cuadras del estadio y completamos el trayecto caminando. Con cada cuadra que pasaba se empezaba a sentir más la tensión y la preocupación en aquella horda de camisetas rojas que nos llevaban al ritmo de canciones populares hasta las inmediaciones del club. Sin embargo, mi papá estaba sereno, con un rostro que emanaba mucha más confianza que la del resto de los hinchas.

Ya cuando estábamos llegando, decidí preguntarle: "Pa, ¿Cómo vamos a salir campeones si en el primer partido perdimos 2-0 y no la tocamos?" Ahí fue cuando él esbozó una sonrisa y me dijo "Somos de Independiente, del Rey de Copas, a estos equipos les ganamos con la camiseta", y al terminar la oración se acercó a un puesto de souvenirs y me compró una moneda de metal, pintada de dorado y con el escudo de Independiente. Si bien no terminé de entender lo que significaba "ganar con la camiseta" me aferré a esas palabras y a esa moneda como si fuera lo único que existía en el mundo en aquel momento.

Una vez que llegamos a la cancha, nos sentamos en una de las tribunas altas del estadio y, a pesar de que estaba en construcción y a medio terminar, yo estaba fascinado por estar en ese lugar que tantas veces había visto por televisión. Esperé sentado hasta el comienzo del encuentro, en silencio y mirando la moneda, intentando aprender las canciones que entonaba el resto para cuando arranqué el partido. A medida que pasaban los minutos los cantos eran más fuertes y se convirtieron en ruido ensordecedor cuando los equipos salieron a la cancha. Fue ahí cuando me paré arriba de mi butaca para poder ver y empecé a tararear las canciones, ya que no terminaba de entender la letra de las mismas.

Independiente empezó ganando. Cuando la pelota tocó la red, me fundí en un abrazo con mí viejo, luego observé la moneda y me dio confianza de que podíamos ganar. La confianza se desvaneció rápidamente ya que el empate del equipo contrario llegó justo sobre el final del primer tiempo y yo me puse a llorar desconsoladamente. Fue ahí cuando mí viejo me miró como si mi tristeza fuese en vano y me dijo "¿Te acordas lo que te dije antes?", cuando asentí con la cabeza, él concluyó: "¿Entonces para qué lloras?"

Al empezar el segundo tiempo, Independiente hizo dos goles rápidos y se vivía un algarabía generalizada en las tribunas, no podía creer lo que estaba pasando. Sin embargo, nada estaba decidido, el partido se definiría desde el punto del penal. Es ahí que, mientras todos se paraban en sus asientos, yo me senté, sin posibilidad de ver los penales debido a mi baja estatura, con cientos de hinchas en frente mío y aferrado a la moneda y a la mano de mi padre mientras repetía en mi cabeza "le ganamos con la camiseta". A medida que pasaban los distintos ejecutantes escuchaba los festejos en los penales de nuestro equipo y el silencio en los penales de los contrarios. Hasta que escuche un ruido metálico, como cuando una moneda cae al piso, seguido de un grito generalizado ensordecedor. El equipo rival había errado desde los doce pasos y  si Independiente convertía se consagraría campeón. La tensión se palpaba en el aire cuando el capitán de nuestro equipo se asomaba para hacerse cargo de ese penal tan importante.

 Escuche el grito desaforado de los hinchas y, antes de que pudiera reaccionar, mi viejo me dio uno de esos abrazos eternos, de esos que uno desea que nunca terminen, y con la voz quebrada y lleno de lágrimas "Viste que tenías que hacerme caso".

Hoy la moneda se encuentra guardada como recuerdo de aquel día y, en los diez años subsiguientes, se convirtió casi en un ritual ir a ver a Independiente cada quince días. Si bien en ese tiempo los resultados nos dieron muchas tristezas, en la que esa mirada que irradiaba confianza desaparecía y con ella desaparecía mi ilusión, y algunas pocas alegrías y abrazos que también quedarán grabados para siempre en mi memoria,  siempre disfruté de poder compartir esos momentos y esa pasión con mi viejo, porque para nosotros, el futbol es lo más importante de las cosas menos importantes.


viernes, 6 de noviembre de 2020

Consigna reseña- Trabajo final

 

Selección de cuentos, de Inés Garland

Por: Joaquín Fernández Vila

El reflejo de la vida

Inés Garland tenía tan solo 11 años y estaba de vacaciones en Mar del Plata cuando escribió su primer cuento. El cuento trata sobre una historia de amor frustrada entre una princesa de papel y un soldado tijera, quien la corta en pedacitos hasta convertirla en un bollito. El paso del tiempo ciertamente le agregó matices a su escritura, pero en esta obra podemos observar que el amor, el deseo y el desencuentro siguen siendo la base de una lectura que nos lleva a reflexionar sobre nuestras propias relaciones afectivas, ya sean de pareja o familiares.

Garland logra en esta obra la difícil tarea de relatar cuentos que son complejos desde sus temáticas, pero sencillos en su expresión. Nos encontramos ante relatos cotidianos, historias simples que potencian la identificación con el lector. Todo esto lo logra, además, haciendo un uso magistral de la economía de las palabras. En la Selección de Cuentos, la autora dice mucho más a través de las acciones de los personajes y en los silencios que de las palabras mismas.

En esta Selección de Cuentos, al igual que en obras anteriores, la autora argentina suele darles un rol protagónico a las mujeres. En el primer relato “El rayo verde” narra la historia de una joven que presencia como su padre se enamora de su mejor amiga y a partir de esta experiencia descubre su propia sexualidad en un viaje de verano a Salinas. La autora nos muestra en la cosificación del hombre hacia la mujer, una perspectiva en la que pone a la mujer como mero objeto de deseo. En dicho cuento se pueden leer citas como: “Los chicos nos miran desde la orilla. Las focas somos jóvenes, con el cuerpo firme y lleno de sol. No sabemos que los chicos nos ven así, tenemos la inconsciencia de la juventud” y “…es como si Ana fuera un guante o una media, algo hecho a la forma de él” son algunos ejemplos de la mencionada cosificación. En algunas entrevistas que dio la autora menciona que la inspiración para la narración de estas problemáticas nace de situaciones que vivió en su propia adolescencia, periodo de su vida en el cual afirma haberse sentido en ocasiones “como en una exposición vacuna donde los hombres te elegían”.

 Sin embargo, en ese cuento también podemos observar un momento de empoderamiento de la protagonista cuando prevalece su deseo erótico por sobre las imposiciones religiosas que marcaban esas acciones como pecado. En este sentido, la autora utiliza sus propias vivencias con los hombres y su educación de monja como objeto de crítica y revelación ante eso que le fue impuesto a una temprana edad.

Uno de los elementos más destacados de este primer relato es la narración desde la candorosa mirada de la juventud que tiene una clara inspiración en Flannery O’ Connor y se repite en el cuento “Oscar”. Esta forma particular de contar una historia genera que, las conclusiones que va planteando la escritora a lo largo del relato, no sean imposiciones, sino que abren a la reflexión y la propia interpretación del lector.

 Este primer relato se inscribe dentro del marco de un viaje familiar, recurso que se repite en esta selección de cuentos, como es el caso de “Nada que hacer” y “Oscar” entre otros. En los cuentos nombrados se muestran grupos familiares que están siempre marcados por imperfecciones, engaños maritales y desamores, rompiendo así con ciertos estereotipos de la “familia perfecta” que se suele plantearse en varias ficciones.  De esta manera, Garland se aleja de todo canon romántico para demostrar que el amor tiene mucho de real y poco de ideal.

Esta cuestión del amor sufrido se ve muy bien reflejada en el “El último muelle”, un cuento que muestra melancolía y un gran sufrimiento por un amor que nunca fue y nos intenta hacer entender esa angustia inmensa que produce la falta de amor. En varias entrevistas con la prensa, Inés Garland mencionó como “La sirenita” de Hans Christian Andersen marcó su infancia y, en este relato, se puede observar una inspiración en aquel relato que, a diferencia con la película de Disney, narra una historia de gran dolor y martirio por amor que deja un resabio angustiante al finalizar la lectura.

Otro de los cuentos más llamativos de esta Selección de Cuentos es “La cautiva”. Allí narra un accidente en unas vacaciones familiares a Misiones el cual hace tambalear las convicciones de una mujer llena de prejuicios. En esta historia, nuevamente la gran escritora argentina, se ahonda en una temática profunda como la discriminación de clase, mostrando como el falso juicio a quienes la narradora describe como indios, “intimidantes con su piel oscura” y a quienes le habla como si fuesen menores de edad. Solo un cambio de perspectiva le hace replantearse no solo sus creencias, sino también sus propias relaciones.

De esta manera, Inés Garland toma aspectos de grandes autores y los fusiona con sus propias vivencias para generar relatos íntimos, sutiles y reflexivos que nos invitan a deshacernos de los prejuicios y a tener una visión más honesta del amor y el deseo. La autora captura, con finura y precisión, la naturaleza humana.

Fuentes adicionales:

Entrevista SpinOff-Inés Garland: https://www.youtube.com/watch?v=1Qq1OWsf7h4

Entrevista mano a mano con Inés Garland en Campo de Batalla: https://www.youtube.com/watch?v=WQ67GAWypjA

martes, 3 de noviembre de 2020

Mc Cullers y Daniel Link- Escenas de lectura

Consigna: lean el artículo de Mc Cullers "Isak Dinesen. En alabanza del esplendor" y el capítulo 2 de La lectura: una vida, de Daniel Link "La escuela primaria. La señorita Celia". Anoten cuáles son las lecturas que destacan ambos textos, la transformación en el sujeto lector que proponen, la relación con la propia vida de los autores que establecen. 

Mc Cullers:

 En este relato la autora cuenta que leyó el libro “Memorias de África” de Isak Dinesen ya que se lo habían recomendado algunos de sus amigos. Ella se notaba escéptica sobre esta lectura y no contaba con grandes expectativas para afrontar el libro .Sin embargo, desde sus primeras páginas le pareció fascinante. Mc Cullers indica que releyó al libro en varias oportunidades y se convirtió en uno de sus preferidos.

Tanto había leído a Dinesen que sentía que era su "amiga imaginaria" ya que sus lecturas la habían acompañado en varios pasajes de su vida. Esa imaginación se convirtió en realidad al conocer en persona a la escritora que ella tanto admiraba. Si bien tenía dudas en conocerla, ya que no quería perderle ese aprecio imaginario que le tenía, se llevó una grata sorpresa con la calidez de la escritora y no solo no degradó esa imagen ideal que tenía sobre ella sino que la enalteció.

De esta manera pudo entablar una relación con aquella persona cuyas escrituras la acompañaron antes de conocerla y tener cierto ida y vuelta a través de carta con una persona que merecía su más alta admiración.

Daniel Link:

La primera escena de lectura que marca Link es la película Sissi que fue el primer film que sus padres le permitieron ir a ver al cine, con el paso de los años siguió toda la carrera de la actriz protagonista y le encontró una nueva significación de esa película con la imagen de Evita y fue a partir de esa resignificación que pudo comprender algunos aspectos del imaginario peronista.

Otra de las lecturas significativas en su vida eran las revistas Anteojitos y Billiken, sin embargo, a medida que fueron aumentando su contenido escolar, Daniel Link empezó a perder interés en las mismas. También señala que la coerción de su abuela para vender esas revistas y la devaluación de esa plata que había obtenido por ellas le generó cierta tristeza.

Una de las situaciones que marcó su vida fue tener como maestra en años consecutivos a Celia que le daba siempre tareas de escritura que a él le gustaban y termino destacándose por su escritura dentro de la escuela por su escritura. Tras perder un concurso de escritura, Celia le recomendó la lectura de "El Principito" y eso generó en él un afán por la lectura que terminaría de concretarse cuando su primo se mudó y le vendió una gran biblioteca de libros.


Borrador de Reseña

 

Selección de cuentos, de Inés Garland

Por: Joaquín Fernández Vila

Inés Garland tenía tan solo 11 años y estaba de vacaciones en Mar del Plata cuando escribió su primer cuento: una historia de amor frustrada entre una princesa de papel y un soldado tijera, que la corta en pedacitos hasta convertirla en un bollito. El paso del tiempo ciertamente le agregó matices a su escritura, pero en esta obra podemos observar que el amor, el deseo y el desencuentro siguen siendo la base de una lectura que nos lleva a reflexionar sobre nuestras propias relaciones afectivas, ya sean de pareja o familiares.

Garland logra en esta obra la difícil tarea de relatar cuentos que son complejos desde sus temáticas, pero sencillos en su expresión. Nos encontramos ante relatos cotidianos, historias simples que potencian la identificación con el lector. Todo esto lo logra, además, haciendo un uso magistral de la economía de las palabras. En la Selección de cuentos, la autora dice mucho más a través de las acciones de los personajes y en los silencios que de las palabras mismas.

En esta Selección de cuentos, al igual que en obras anteriores, la autora argentina suele darles un rol protagónico a las mujeres en la mayoría de los cuentos. En el primer relato (“El rayo verde”), que narra la historia de una joven que presencia como su padre se enamora de su mejor amiga y descubre su propia sexualidad en un viaje de verano a Salinas, la autora nos muestra en fragmentos en los que se vislumbra la cosificación del hombre hacia la mujer, una perspectiva en la que pone a la mujer como mero objeto de deseo, citas como: “Los chicos nos miran desde la orilla. Las focas somos jóvenes, con el cuerpo firme y lleno de sol. No sabemos que los chicos nos ven así, tenemos la inconsciencia de la juventud” y “…es como si Ana fuera un guante o una media, algo hecho a la forma de él” son algunos ejemplos de ello. En algunas entrevistas que dio la autora menciona que la inspiración para la narración de estas problemáticas nace de situaciones que vivió en su propia adolescencia, donde afirma haberse sentido en ocasiones “como en una exposición vacuna donde los hombres te elegían”.

 Sin embargo, en ese cuento también podemos observar un momento de empoderamiento de la protagonista cuando prevalece su deseo erótico por sobre las imposiciones religiosas que marcaban esas acciones como pecado. En este sentido, la autora utiliza sus propias vivencias con los hombres y su educación de monja como objeto de crítica y revelación ante eso que le fue impuesto a una temprana edad.

Uno de los elementos más destacados de este primer relato es la narración desde la candorosa mirada de la juventud que tiene una clara inspiración en Flannery O’ Connor y se repite en el cuento “Oscar”. Este forma particular de contar una historia  genera que las conclusiones que va planteando la escritora a lo largo del relato no sean imposiciones, sino que abren a la reflexión y la propia interpretación del lector.

 Este primer relato se inscribe dentro del marco de un viaje familiar, recurso que se repite en esta selección de cuentos, como es el caso de “Nada que hacer” y “Oscar” entre otros. En los cuentos nombrados se muestran grupos familiares que están siempre marcados por imperfecciones, engaños maritales y desamores, rompiendo así con ciertos estereotipos de “familia perfecta” que se suele plantear en varias ficciones.  De esta manera, Garland se aleja de todo canon romántico para demostrar que el amor tiene mucho de real y poco de ideal.

Esta cuestión del amor sufrido se ve muy bien reflejada en el “El último muelle”, un cuento que muestra melancolía y un gran sufrimiento por un amor que nunca fue y nos intenta hacer entender esa angustia inmensa que produce la falta de amor. En varias entrevistas con la prensa, Inés Garland mencionó como “La sirenita” de Hans Christian Andersen marcó su infancia y, en este relato, se puede observar una inspiración en aquel relato que, a diferencia con la película de Disney, narra una historia de gran dolor y martirio por amor que deja un resabio angustiante al finalizar la lectura.

Otro de los cuentos más llamativos de esta Selección de cuentos es “La cautiva”, un accidente en unas vacaciones familiares a Misiones hace tambalear las convicciones de una mujer llena de prejuicios. En esta historia nuevamente la gran escritora argentina se ahonda en una temática profunda como lo es la aprensión de clase, mostrando como el falso juicio a quienes la narradora describe como indios, “intimidantes con su piel oscura” y a quienes le habla como si fuesen menores de edad y como un cambio de perspectiva le hace replantearse no solo sus creencias, sino también sus propias relaciones.

De esta manera, Inés Garland toma aspectos de grandes autores y los fusiona con sus propias vivencias para generar relatos íntimos, sutiles y reflexivos que nos invitan a deshacernos de los prejuicios y a tener una visión más honesta del amor y el deseo. La autora captura, con finura y precisión, la naturaleza humana.

Fuentes adicionales:

Entrevista SpinOff-Inés Garland: https://www.youtube.com/watch?v=1Qq1OWsf7h4

Entrevista mano a mano con Inés Garland en Campo de Batalla: https://www.youtube.com/watch?v=WQ67GAWypjA

sábado, 17 de octubre de 2020

Respuesta a la negativa de Britney Spears

 Consigna: sigue el intercambio de cartas: el personaje propio recibió la negativa a su propuesta, tiene que redoblar los esfuerzos para convencer al otro personaje. Para ello, deberá utilizar una analogía (es una doble comparación, A es a B como C es a D) y el recurso de un ejemplo histórico, además de contraargumentar lo que aparece en la carta de la negativa.

Micky Mouse:

Para comenzar quiero agradecerte por la propuesta que me has hecho y los halagos sobre mi música y mi carrera. Pero debo rechazar amablemente tu proyecto de musicalizar una de tus películas. 

Debes recordar tu programa de televisión The Mickey Mouse Club creado por quien entiendo sigue siendo tu representante, Walt Disney, producido por Walt Disney Productions y emitido por primera vez por ABC en 1955. Mi participación en la sexta y séptima temporada fue el punto de partida de mi carrera y estaré eternamente agradecida por eso.

Sin embargo, el rechazo a mi pedido del papel de Hannah Montana todavía es una herida que no he podido sanar y que me impide volver a trabajar con ustedes. De todas formas creo que Miley supo adecuarse bastante bien a las exigencias de Disney...

Vuelvo a expresarte mi gratitud, y mis mas sinceras disculpas por mi respuesta tan desalentadora.

Atte, Britney. 

Respuesta:

Querida Britney:

No sabes el placer que me genera saber que aún recuerdes con agrado tu paso por mi programa y me llena de orgullo pensar que fue el punto de partida de una excelente carrera.

Sin embargo, me encuentro un poco sorprendido tras la negativa para musicalizar una de nuestras canciones ya que hace poco vimos con Minnie una entrevista en Entertainment Tonight de 2018, donde mencionaste que trabajar con nosotros fue "uno de los momentos más especiales de tu vida" y agregaste que te gustaría volver a trabajar con nosotros.

En cuanto al casting de Hannah Montana, sentimos que era el momento de darle una oportunidad a la talentosa Miley Cyrus y ella no decepcionó, también conocemos de la gran relación que tienen ustedes dos y, más allá de la frustración de aquel momento, siento que en el fondo estarás orgullosa de su rendimiento en aquel papel.

Dicho esto, en esta oportunidad queremos reconocer tu gran talento con una canción en alguna de nuestras películas y no solo podemos ofrecerte un gran contrato para hacerlo sino que podemos resolver los problemas legales que estas teniendo por la tutela legal. Digamos que tanto nuestros abogados como nuestros contactos pueden usar un par de "Mickeyherramientas misteriosas" para sacarte de aquel embrollo legal, como lo hicimos en 2005 cuando ganamos un juicio que nos demandaba por "plagio" por el film Nemo.

Nos encantaría volver a trabajar con vos y espero que sepa que una propuesta de esta magnitud es a un artista lo que el paso del cometa Halley es a la Tierra. Estaremos atentos a su respuesta y ojalá logremos que nuestros sueños se hagan realidad.

Mickey Mouse

Nota de lectura- Seguimos con la reseña

 Consigna: leer y hacer un comentario/nota de lectura, en donde subrayen qué procedimientos o recursos les pueden ser más útiles para escribir las reseñas, acerca de: 

-Sobre "Manual para mujeres de la limpieza", de Lucia Berlin, por Martín Caamaño 

-Sobre "Realidad", de Sergio Bizzio, por Patricia Somoza 

-“Críticos de cine”, Javier Porta Fouz (fragmento) 

-“¿Buenas críticas es igual a buenos libros?” (fragmentos) 

-“Tribulaciones de un comentarista de libros”, Luis Fernando Afanador (fragmentos)

En la reseña "Manual para mujeres de la limpieza" de Martín Caamaño me pareció interesante como advierte sobre lo innovador y poco reconocido que es el trabajo de la autora Lucía Berlín. Si bien puede parecer que desarrolla más sobre la propia escritora y no sobre la obra, creo que de esa manera contextualiza la escritura de la difunta artista y luego se deshace en halagos de la cuentista a la que describe como una adelantada para su época y señala una variedad de recursos destacados dentro de su obra.

De la reseña de Patricia Somoza sobre "Realidad" de Sergio Bizzio siento que es importante destacar como compara esta novela con otra de sus obras y la influencia que se puede ver de otros artistas. Sin embargo, me dio la sensación de estar leyendo un resumen y no una reseña ya que la mayoría de las líneas se ocupan de sintetizar la historia deshaciéndose del factor de la intriga que deben generar las reseñas.

En el texto de Javier Porta Fouz analiza la crítica como un arte, al igual que Oscar Wilde. Al igual que el escritor irlándes, coincide en los elementos para un escritura crítica y, en lo personal, intentaré tenerlos en cuenta para una próxima escritura de este estilo. Los elementos destacados son información, análisis, interpretación y evaluación. Otorgar datos que atrapen al lector, plantear una perspectiva propia, darle al texto una forma crítica y un cierre contundente son algunos de los puntos que Fouz señala como útiles en "Críticos de cine".

En "¿Buenas críticas igual a buenos libros?" remarca como las significaciones que hacen los críticos de ciertas obras no son absolutas, sino que es una forma posible de significar esa obra, donde entra la subjetividad del crítico y sus posturas ideológicas a la hora de enaltecer o defenestrar un escrito. Sin embargo, también señala que los errores tienen que darse a luz por si solos y que la crítica debe ser generosa.

Finalmente, de "Tribulaciones de un comentarista de libros" llamó mi atención la idea de la crítica como un espacio para expresar lo que a uno como crítico lo ha conmovido al momento de leer un determinado libro, siempre teniendo en cuenta que quienes leen una reseña no han leído la obra y no se debe arruinar la experiencia de la lectura para ellos.

martes, 6 de octubre de 2020

Nota de lectura- Reseñas

 Consigna: leer hacer un comentario/nota de lectura acerca de: 

Sobre Un día cualquiera, de Hebe Uhart, por Carlos Pardo.

Sobre Los lemmings y otros, de Fabián Casas, por Sandro Barrella.

“La reseña como género discursivo”, Daniel Link.

“Enamorado”, Graciela Speranza.

Nota de lectura- Reseñas

La reseña es un género discursivo en el que se escribe sobre relatos, cuentos, libros, ensayos y otros escritos. En estas, y como bien marca Graciela Speranza, debe haber una mezcla de efervescencia, rigor, inteligencia, gusto y transparencia. Debe haber un buen uso de adjetivos y de la prosa, pero sin caer en un narcisismo que deje el argumento sobre aquello que está siendo reseñado en segundo plano.

Al tratarse de interpretaciones de distintas obras de arte, estas suelen ser subjetivas y las evaluaciones sobre una misma obra pueden ser totalmente opuestas, creo que esto es lo que quiere marcar Daniel Link cuando afirma que: “El crítico que hace reseñas sigue funcionando en tanto juez de arte, es decir: a partir de la evaluación de la obra-mercancía que se somete a su juicio (hipotética y tal vez ilusoriamente, autónomo respecto de nada que no sea su propio “raciocinio”). La reseña, así, es el género de la crítica donde la evaluación aparece de manera más explícita.” .

En "Enamorado", de Graciela Speranza, también podemos encontrar algunos de los problemas que se encuentran en este tipo de género. Marca la necesidad de hacerse cargo de lo que se escribe firmando la reseña y que las reseñas online pueden caer en "un anonimato cobarde". También muestra un rechazo tanto a las comparaciones y a los rankings, como la reseña que solo busca marcar los aspectos de una buena obra o el hecho de realizar un "destrozo deportivo" de una mal libro. Otro de los problemas que se encuentran detallados tanto en el texto de Daniel Link como en el de Graciela Speranza es la reseña como publicidad, en la que no se cumple con esa transparencia que es necesaria en este tipo de evaluaciones.

En cuanto a las reseñas, Carlos Prado y Sandro Barella hacen una gran labor, no solo dando un contexto general de la obra y el autor, sino que marcan cuales fueron las lecturas más interesantes sin anticipar mucho y generando un deseo de leer esas obras. Uno no solo puede imaginarse el tipo de cuentos que va a poder leer en esos libro, sino que también encuentra una resignificación de los mismos en la reseña y que pueden profundizar el análisis propio al momento de la lectura.


martes, 29 de septiembre de 2020

Respuesta de Mickey Mouse a Amelia Earhart

 Querida Amelia:

Me alegro de poder escuchar tanto de sus hazañas, como de las grandes aventuras que la esperan con su amigo Fred.

Más allá de no querer desestimarte ni a vos ni a tus logros, quisiera avisarle que nuestro equipo creativo tiene algunas ideas que podrían ser más relevantes que alguna idea divertida de una simple aviadora. Si bien me encanta saber que le gustaría formar parte de algún programa conmigo, no puedo cumplirle ese sueño a todos los admiradores que me lo proponen. Cómo se lo puede imaginar querida Amelia, no todos tienen lo necesario para despegar en esta pista.

En cuanto a la imagen de mujer que proyecta nuestra empresa, creo que no necesita muchas modificaciones. Todas las niñas pequeñas desean poder ser como una de nuestras princesas y nosotros solo somos la plataforma para que puedan hacer esos sueños realidad. No solo eso, sino que tanto Minnie, como Daisy, se sintieron ofendidas por estos comentarios ya que ellas trabajan incansablemente para que las niñas puedan ser todo lo que desean y más. 

Cómo siempre, fue un placer poder mantenerme al tanto de una figura tan relevante de nuestro país y quédate tranquila, que mientras vos cumplís tus sueños en las nubes, nosotros nos encargamos de los sueños en la tierra

Saludos,

Mickey Mouse

martes, 22 de septiembre de 2020

Carta de Mickey Mouse a Britney Spears

 22 de septiembre del 2020. Orlando, Florida

Querida Britney Spears:

Soy un gran admirador tuyo y de tu música y quería ofrecerte, a través de esta carta, una interesante propuesta laboral en la que ambos podremos salir beneficiados.

Como te podrás imaginar, en Disney estamos en una constante búsqueda de los mejores artistas para musicalizar nuestras películas y es por eso que te estamos buscando. Yo, personalmente, soy fanático de  tus hits como Toxic o Oops!... I Did it again y soy consciente también del gran impacto que generó y que sigue generando tu música en los jóvenes (y ya no tan jóvenes ). Creo que no hay una persona que represente más los valores de Disney como la mismísima "Princesa del Pop" y es por eso que me encantaría que puedas musicalizar alguna de nuestras películas.

  Sé que pasaron unos cuantos años del momento más alto de tu carrera y creo que desde Disney te podemos dar un nuevo envión hacia la fama como lo hicimos con distintas artistas. Miley Cyrus, Selena Gómez y Demi Lovato son solo algunas de las muchas artistas que encontraron la fama gracias a nosotros y estoy convencido de que podemos lograr lo mismo si terminas decidiendo por colaborar con nosotros.

Obviamente, la plata no es un problema para nosotros y aunque entiendo que la propuesta podría llegar a ser un riesgo para la imagen que formaste en estos años, quisiera recordarte un consejo que una vez le dio el Hada Madrina a la Cenicienta: "El que nunca arriesga, se suele perder lo mejor".

Bueno, espero que podamos concretar este proyecto juntos y, en caso de aceptar la propuesta me encantaría que nos juntemos en mi casa en Orlando, ya que Minnie, Pluto, Donald, Daisy y Goofy están muy emocionados por conocerte y como siempre, espero que seamos el lugar en el que tus sueños se hagan realidad.

Saludos

Mickey Mouse

viernes, 4 de septiembre de 2020

La plaza de mi infancia

Entrada al diario 4/9/2020 

En estos días que las salidas a la calle se cuentan con los dedos de una mano y que todos los aspectos ed la vida transcurren a través de una cámara y dentro del hogar, no puedo dejar de acordarme de los momentos en los que iba a la plaza cerca de mí casa. De chico, a deslizarme en el tobogán y a insistirle fervientemente a mis padres para que me dejen subirme otra vez a la calesita, en este último tiempo a tirarme en el pasto y dejar pasar el tiempo, insultando para dentro a esos chicos que gritan de más y viendo, de vez en cuando, algún partido de fútbol improvisado entre esos chicos que gritan, lloran y exageran cada acción, como lo solía hacer yo.

Plaza Monseñor de Andrea (Buenos Aires) - 2020 Qué saber antes de ir - Lo  más comentado por la gente - Tripadvisor

viernes, 21 de agosto de 2020

Nota de lectura "Ocio" de Fabian Casas

 En este cuento Fabian Casas utiliza un estilo narrativo basado en un lenguaje coloquial porteño, en el que el protagonista narra su historia y su relación con sus amigos, el trabajo, la literatura y las drogas. En esta ocasión el autor, a diferencia de "Asterix, el encargado", utiliza más frecuentemente los diálogos,lo que otorga cierto dinamismo a la narración, y también los hechos están contados de manera más lineal que en el cuento antes mencionado.

También se puede observar una intertextualidad con el cuento "Asterix, el encargado" cuando hablan de la similitud entre Sergio Narvaiz y el narrador y como Sergio Narvaiz perdió a su gato por dejarlo en el garage siguiendo la recomendación de su encargado.

Dentro de los temas que pone sobre la mesa "Ocio" se puede decir que la adicción a las drogas y el narcotráfico afectan de gran manera la vida del narrador, tanto en su salud como en la relación con sus amigos. Luego hay una tensión con la muerte a lo largo del relato, tanto con la muerte de su madre, como con las distintos problemas de salud que sufrieron tanto el narrador como su amigo Roli. Otros temas que aparecen constantemente a lo largo del cuento son la literatura, la música y el cine, de manera que el protagonista va dando su opinión sobre distintas bandas, autores y películas. 

En este cuento los personajes se van construyendo a través de su relación con las drogas, a medida que estos iban aumentando en su consumo tanto su negocio de venta de narcóticos como su salud se iban deteriorando al punto de llegar a graves problemas de salud para los dos amigos.

Dentro de los varios recursos literarios envidiables que se pueden apreciar en este cuento, el que más impacto me generó es la cercanía que genera con el lector al utilizar un lenguaje tan coloquial, generando un ambiente en la lectura en el que uno se puede sentir fuertemente inmerso y representado en la vida del protagonista, que se muestra como un porteño más, divagando por las calles de la capital en la oscuridad de la noche

martes, 18 de agosto de 2020

Nota de lectura "Asterix, el encargado" de Fabian Casas

 En este cuento de Fabian Casas utiliza un estilo narrativo que juega mucho con la temporalidad y con la multiplicidad de historias, a partir de distintas historias, que en un comienzo parecen no tener mucha relación, y la utilización de varias prospecciones y retrospecciones, se va armando la historia principal a medida que esas historias que parecen inconexas se van uniendo y van formando el relato. El estilo del autor es bastante descriptivo, en el cuál el recurso del diálogo está casi dejado de lado. En está descripción utiliza bastantes términos muy relacionados a la cultura porteña, lo que da una sensación de proximidad a quienes pueden comprender esas referencias, pero me imagino también que aquellos que no están adentrados en esa cultura pueden encontrar alguna dificultad para entender ciertas partes del cuento.

A medida que estas historias se van desarrollando, vamos conociendo más sobre las características de los personajes, de donde vienen y como van formandose las relaciones, tanto la del narrador con Asterix, como la de el narrador con su gato y Susi.

Algunos de los temas más relevantes que toca son el escenario de la poesía en Argentina en aquel contexto, los delitos policiales y el encubrimiento de los mismos y como se responsabiliza a personas de clases sociales más desfavorecidas y sin apoyo alguno de estos crimenes. Tambien toca un tema que pareciera más banal como es el celo de los gatos y la relación amorosa plenamente dependiente de Susi.

Lo que más me sorprendió de este cuento fue esa facilidad para manejar la temporalidad y las distintas historias para llegar a un final inesperado. Ese manejo de la información que mantiene en vilo al lector hasta último momento aun sabiendo de las acusaciones al encargado y en el círculo que se maneja debido a algunas de las historias que se desarrollan a lo largo del relato.


El reencuentro- A partir de Poissant

Dan tomo la interestatal sin ningún vestigio de duda en su cabeza y empezó su recorrido hacia Baton Rouge, Mickey seguramente estaría esperando a que él llegue aquella noche a trabajar y, cuando vuelva de aquel viaje, seguramente se encuentre desempleado. Pero nada de eso le importaba, el reencuentro con su hijo no podía esperar. Mientras el viento soplaba y movía ligeramente la camioneta hacia el costado de la ruta, las gotas de lluvia caían una atrás de la otra sobre el vidrio del parabrisas como si se tratará de las bombas que caían en las playas de Normandía en el documental que habían visto con Cam en la casa de su padre. El viaje durará toda la noche -pensé-, pero el frío de mis prendas mojadas, la adrenalina de ver de nuevo a Jack y las costumbres de trabajar por la noche me ayudarán a mantenerme atento a la carretera.

 

Jack también nació en un día lluvioso. Eran alrededor de las tres de la tarde y Dan estaba trabajando como mesero un pequeño restaurant familiar cuando lo llamaron de la barra para avisarle del llamado de Lynn.

-Rompí bolsa- dijo Lynn con un tono agitado y desesperado-. No tengo a nadie que me ayude, no sé qué hacer.

Escuchar esas palabras dibujaron una sonrisa en mí cara, pero rápidamente se convirtió en desesperación, mi turno no terminaba hasta dentro de tres horas y aun saliendo en ese momento, el restaurante se encontraba demasiado lejos del hospital más cercano a su casa.

-Tranquila, llama rápido a la ambulancia. Te prometo que yo voy a estar allá pronto para ayudarte en todo lo que necesites- contesté sin estar completamente seguro de que pudiera cumplir aquello que estaba prometiendo fuese cierto.

- Esta bien, pero…- una de las contracciones interrumpió la frase- no voy a poder hacerlo sola.

Rápidamente corté la llamada y salí disparado hacia mi camioneta sin dar aviso a nadie de lo que había pasado. Tenía los minutos contados y la tormenta que había ese día no iba a hacer el recorrido al hospital mucho más fácil.

 

Cuando la vieja camioneta pasó por debajo de un puente, el vidrio delantero quedo totalmente cubierto por el agua, como si hubiesen tirado un baldazo de agua fría para que vuelva al presente. A medida que pasaban las horas y me acercaba aún más al pequeño pueblo de Luisiana empezaba a imaginarme los distintos escenarios y reacciones que podría tener Jack al verme luego de todo el daño que le había generado, al fin y al cabo, Cam no había perdonado a su padre, ¿Por qué Jack haría las paces? Él sabía que no había sido justo con su hijo, no porque haya podido entenderlo sino porque el alcohol ni siquiera permitió que lo intente.

 

A pesar de estar acostumbrado a mantenerme despierto por noches enteras, el estrés que había vivido en el intento de rescate del lagarto del padre de Cam estaba surgiendo efecto en el cansancio que sentía, pero no había tiempo para parar a dormir si quería llegar a primera hora del día siguiente al nuevo hogar de mí familia.

 En la primera noche que Jack llegó a su casa, tampoco tuve mucho tiempo de descanso. Tras haber llegado de buena manera para apoyar a Lynn durante el parto, Jack nació sano y volvieron a su hogar con un nuevo integrante en la familia. Aquella noche ninguno de los dos tuvo muchas horas de sueño. Siempre que intentaban dormir, Jack empezaba a llorar. Lynn intentó tranquilizarlo unas cuantas veces, pero a la tercera vez que comenzaron las lágrimas sentí como Lynn toca mi hombro.

-Yo no me levantó más-dijo-. Yo ya lo tuve que cuidar y llevar conmigo a todas partes durante nueve meses en mi panza, ahora te toca a vos.

-Yo voy, intenta descansar que tu día fue más laborioso que el mío- contesté, aunque no tenía muchas alternativas ya que lo de mi esposa fue una orden y cayó desmayada antes de escuchar mi respuesta.

 

Así fue como me acerqué a la cuna y miré a mí hijo que se encontraba rodeado de sábanas blancas, imaginaba que seguramente era así como se veían los ángeles, aunque quería imaginar que no eran tan molestos y ruidosos como el constante chillido de Jack.  Luego lo levanté y empecé a mecerlo en mis brazos, al poco tiempo las lágrimas empezaban a desaparecer de los ojos de Jack y empezaban a aparecer en mis ojos, no podía contener la alegría que le generaba ese momento y de tener la posibilidad de acompañar y aconsejar a ese pequeño durante todos los momentos de su vida. Jack finalmente se quedó dormido cuando los primeros rayos de sol entraban por las rendijas de la persiana y lo apoyé suavemente en la cuna y lo arropé cariñosamente antes de empezar a prepararme para volver a trabajar.

 

A medida que se disipaba la tormenta, salía la luz que marcaba el comienzo de un nuevo día y el cartel verde que decía "Bienvenido a Baton Rouge" se veía cada vez más grande y cuando más crecía el cartel, más crecían mi nerviosismo. Una vez pasado el cartel busque el papel en el que tenía anotada la dirección, cuando leí "Calle Bennington 207" en aquel pedazo de servilleta arrugada y maltrecho por el paso del tiempo empezó a pensar que tal vez esto era un error, ellos se habían mudado hasta aquí solo para alejarse de mí y hoy volvería a entrometerse en sus vidas. Sin embargo, ya era tarde para dar la vuelta, ya me encontraba demasiado cerca de la casa de mi hijo.

Baton Rouge era una ciudad con muchos espacios verdes, se veían muchas ardillas correteando por los árboles y distintos tipos de aves que eran alimentadas con migajas de pan por señores mayores que se encontraban disfrutando del calor del sol tras la gran tormenta del día anterior. Al darme cuenta de esto no pude evitar sonreír porque sabía cuánto amaba la naturaleza Jack. Cuando Jack era pequeño, Lynn quería que el niño juegue al fútbol, pero el siempre que podía se ponía a un costado de la cancha y empezaba a tocar a los distintos insectos que se encontraban en el suelo con un palo. Siempre que me acercaba para que vuelva a la cancha giraba y me decía:

-Siempre que patean o corren, están matando a estos insectos, yo no los quiero matar. Ellos son importantes para la ecología.

- Si vos lo decís, debe ser así, a fin de cuentas, sos vos el que lee todos los libros sobre animales- le contestaba siempre. A mí tampoco me habían interesado los deportes de pequeño y no entendía la obsesión de Lynn por ese deporte. Al verlo tan feliz manipulando a los insectos, dejaba que lo haga, aunque ella me regañaba por no convencerlo de jugar.

 

Cuando mis ojos volvieron al mapa, me di cuenta que estaba a un par de cuadras y decidí estacionar el auto y acercarme hasta allí a pie. Mientras seguía planteándome los distintos escenarios posibles y pensaba en distintas disculpas a Jack por no aceptarlo como verdaderamente era, iba observando que aquel barrio era mucho mejor que en el que vivían cuando estaban todos juntos y fue reconfortante pensar que tal vez el cambio que habían hecho resulto ser mejor para la vida de su ex esposa y su hijo.

 

 Al llegar a la esquina de la casa, mi cuerpo empezó a temblar como lo hizo la primera vez que tuve a Jack en sus brazos, la ropa que se estaba empezando a secar por el calor de aquel día, volvía a humedecerse con mi transpiración nerviosa y mi corazón bombeaba a gran velocidad como cuando tuve que tapar con cinta las fauces del lagarto gigante del padre de Cam.  Quería frenar para tranquilizarme y acomodarme, pero cuando me quise dar cuenta ya me encontraba frente al buzón con el apellido de soltera de mi ex esposa.

 Era una casa blanca, como las sabanas que usó Jack en su primera noche conmigo, con tejas rosadas y un poco descuidadas. Me armé de coraje y me acerque a la puerta y alce mi mano para golpearla, antes de que mi mano llegué a impactar con la madera, se empezaron a escuchar las cerraduras. Ya podía imaginarme, como lo había soñado en tantas ocasiones, que Jack era quién abriría esa puerta y que podría volver a abrazarlo y tenerlo en mis brazos como la primera vez. Se escucha la última cerradura y la puerta se entreabre y el rostro que aparece no es el de Jack, es el rostro ceñudo de Lynn que no quería saber nada sobre mí y tampoco quería que vuelva a la vida de Jack. Mi mundo se cayó a pedazos en ese instante, pero no podía desmoronarme, tenía que formar parte de su vida de alguna forma.

 Mi manera de mostrar arrepentimiento fue empezar a colaborar económicamente para que nuestro hijo vaya a la universidad, pero no pude ver a mi hijo y siempre me va a quedar la intriga si alguna vez supo de aquella visita, supongo que no fue tal como lo había soñado en tantas ocasiones, pero es entendible, hay ciertas cosas en las que no alcanza el arrepentimiento para sanar las heridas.

sábado, 15 de agosto de 2020

"El hombre lagarto" y "El cielo de animales" de David Poissant- Nota de lectura

 El cuento de David Poissant, "El hombre lagarto", tiene un estilo basado fuertemente en los diálogos , generando así una lectura dinámica y atrapante.  La historia está narrada desde el punto de vista de Dan, un hombre que lo perdió todo por no poder aceptar la sexualidad de su hijo, que ayuda a su amigo a despedirse de su difunto padre, que solía atacarlo físicamente. A partir de la retrospección narra los hechos violentos que rompieron la relación tanto con su hijo como con su ex esposa. A medida que ve como había terminado la vida del padre de su amigo y la relación que mantuvo con él, va tomando dimensión de los errores cometidos en el pasado y de cuanto extraña a su hijo. Esto genera que el personaje del narrador vaya evolucionando a lo largo de la historia, rasgo que hace la lectura verdaderamente interesante.

En este cuento se abordan temas sensibles como la homofobia, el desconocimiento que existe sobre las diferentes orientaciones sexuales y como los errores que se producen en la paternidad pueden afectar la vida de un hijo a largo plazo. Algo que me pareció interesante del cuento fue, como el autor logró abordar todos estos temas mientras ocupó la mayor parte de las lineas a describir el traslado de un caimán a su habitat natural.

En cuanto a los recursos utilizados en el cuento, creo que algunos de los que ya mencioné son los más interesantes, tanto la introspección del personaje principal como la retrospección a los hechos con su hijo son utilizados excelentemente para marcar el desarrollo del personaje a lo largo del cuento. Luego creo que es muy adecuado el uso de los diálogos para poder darle dinamismo a as distintas historias que se desarrollan dentro del mismo cuento.

Por el lado de "El cielo de los animales" se construye un estilo de narración similar al cuento "El hombre lagarto", pero con una mayor utilización del recurso descriptivo, en este también trata un tema sensible como lo es el SIDA y la velocidad con la que este puede acabar una vida si no se inician los tratamientos a tiempo. Nuevamente la retrospección tiene un papel importante en la narración, pero en este cuento no hay tanto desarrollo de los personajes, sino que se presenta esa tensión entre la velocidad del auto y la velocidad en la que la enfermedad se lleva la vida del hijo de Dan.

miércoles, 5 de agosto de 2020

El Cuento de navidad de Auggie Wren

Lo primero que llamó mí atención fue la forma en la que se va desarrollando la historia de a poco, aunque evitando que se transforme en una lectura tediosa. También me sorprendió que la historia no cumple con los estereotipos típicos de un cuento navideño.

Uno de los recursos que encontré más interesantes es el desarrollo de una historia dentro de la  misma historia. Me pareció bastante innovador que se empiece contando la historia de las fotos, dando a insinuar que está sería la historia principal, sin embargo es utilizada como una herramienta para darle más sentido al cuento de navidad.
 
Me pareció una lecturas  simple y entretenida en la que se genera un ambiente ameno de un amigo contándole a otro una anécdota sobre la navidad y me pareció muy entretenida la cita sobre el final del cuento:
"Mientras haya una persona que se la crea, no hay ninguna historia que no pueda ser verdad." Creo que esa llegada al lector/oyente es la verdadera esencia de la narración y de las historias.

domingo, 5 de julio de 2020

Limpiando el colegio- cuento propio

Ninguno de los alumnos que nos propusimos como voluntarios para una acción tan noble, como limpiar el colegio, nos podíamos imaginar que íbamos a terminar el día en la oficina del rector, intentando buscar excusas para evitar sanciones graves por parte de la escuela. Sin embargo, todo empezó esa misma mañana cuando la preceptora entró al aula buscando gente para que el colegio recupere su fachada original tras las elecciones. Es ahí cuando Ale, "El Tumba", yo y cinco compañeros más nos mostramos predispuestos a limpiar el frente de nuestra escuela, no es casualidad que la mitad de la clase haya levantado la mano ante semejante propuesta, ya que nos daba la oportunidad de perder casi un día entero de clase.

Es así, como bajamos los ocho y empezamos a retirar los panfletos de Raúl Alfonsín y a limpiar las pinturas con el nombre de Ítalo Luder. Mientras siete de nosotros sacabamos pancartas y afiches, "El Tumba" decidió tirarse en la vereda, sacándose primero el guardapolvo y luego la remera, dejando su torso desnudo para tomar sol como si los adoquines fueran una reposera del balneario Bristol de Mar del Plata.

-¿ Quién se lo hubiese imaginado no?-se preguntó mientras su piel empezaba a enrojecerse por los rayos del sol-Esta libertad hace unos años era impensada.
- Dale Tumba, déjate de joder y ponete a limpiar- le contestó Ale mientras removía uno de los papeles del Partido Intransigente.

Si solo supiera que esa iba a ser la última vez que iba a ver el sol en mucho tiempo, hubiese hecho caso al consejo, porque mientras "El Tumba" seguía hablando, la atención del resto del grupo se desvío hacia la esquina, en la que podíamos ver como se acercaba el viejo de nuestro amigo a la entrada del colegio.

En el momento que la sombra de su papá arruinó la sesión de bronceado, estallaron las risas de todos, menos del Tumba, que perdió todo el color que había ganado su cara en ese tiempo y se tiñó de un color más pálido que el mismo guardapolvo que estaba usando como almohada.

-Desubicado- le dijo mientras lo agarraba de la oreja- ¿Por qué no te metes en la escuela a levantar las siete materias qué debes?

Ya con la baja de nuestro amigo, que desde ese momento solo pudo ir de la casa al colegio y del colegio a la casa, y después de un par de chistes al respecto, continuamos con la limpieza que teníamos que hacer. Habíamos guardado lo más complicado para el final, que era limpiar el techo que se encontraba con una gigantesca pintura con la inscripción "UCD-Alsogaray". De esa manera buscamos la escalera y Ale se propuso para subir y empezó a fregar.

-Ya termine- dije de manera ilusa cuando estaba borrando la última letra de la propaganda.

Cuando levanté la cabeza y miré hacia abajo, observe que me habían dejado atrapado en el techo y se habían llevado la escalera. Analicé mis opciones, si me tiraba desde ahí me iba a romper algo y sabía que ellos no iban a volver. También podía esperar hasta que terminen las clases, pero faltaban tres horas para eso y no quería meterme en problemas por no estar en clase tanto tiempo.

Tras pensar en dos o tres alternativas que no iban a ser posibles, decidí tomar la única opción viable que era entrar por la ventana aislada que apuntaba al techo, que era la de un aula de un bachiller solo para chicas. Cuando me asomé para ver como ingresar, observe al resto del grupo, en la ventana que apuntaba al pasillo, intentando aguantar la risa mientras intentaba entrar sigilosamente al aula.

Obviamente cualquier intento de sigilo era en vano y decidí meterme al aula, que explotó en carcajadas tanto de adentro como desde afuera de la misma. Yo no sabía dónde esconderme de la vergüenza y esa sensación solo aumentó cuando la profesora, que era mayor de edad y bastante autoritaria, me sacó del aula llena de furia y de indignación. Al pisar el pasillo del colegio, las risas se apagaron y las siete cabezas se voltearon a la derecha para ver al rector.

-Espero que me puedan dar una buena explicación para todo esto- Gritaba mientras señalaba hacia su oficina.

viernes, 3 de julio de 2020

Análisis de textos Temporalidad y mirada en el relato

En los textos de Ana Sarchione se explican distintas herramientas a la hora de narrar una historia.

En el texto de "La mirada en el relato" me pareció interesante el análisis del cuento de Cortázar "Las babas del Diablo". Lo que más me llamo la atención fue como dentro de un mismo cuento se demuestra la importancia de la focalización a través de la cámara de fotos del protagonista. A través de lo que ve (y lo que no ve) mediante el lente es aquello que le genera complicaciones a la hora de narrar la historia de esa fotografía.

Por otro lado, en el texto acerca de la temporalidad, me parecieron de mucha importancia todas las herramientas a la hora de narrar, dentro de las explicaciones sobre la temporalidad, me parecieron muy ilustrativas las explicaciones de elipsis y pausas en sus distintas variaciones ya que son dos recursos que no utilizo mucho al escribir y siento que pueden enriquecer mucho la lectura de cualquier cuento.

Análisis de "Perros de la calle" de Tarantino

Este film del reconocido director Quentin Tarantino trata sobre un robo de una joyería realizado por seis delincuentes, cuyos nombres eran colores asignados por el jefe de la operación. Este acto delictivo no salió de la manera planeada a causa de la llegada temprana de la policía al lugar de los hechos, a medida que los criminales llegan al lugar de encuentro tras el crímen fallido, intentan descubrir quién es el policía infiltrado en la operación que aviso de antemano a las fuerzas de seguridad.

La historia está narrada dentro del granero abandonado que fue elegido como lugar de encuentro y, a medida que van llegando los delincuentes, se cuenta la historia de como cada uno de ellos logró formar parte de este equipo de ladrones. La focalización de la narración solo se aparta del granero en estos flashbacks que nos van mostrando una mayor profundidad en la historia de los protagonistas y vamos descartando si ellos son los policías. También hay una utilización de música movida y alegre en contrapunto a la violencia constante que hay en la película.

Acercándonos al final el Señor Naranja, quién tenía una grave lesión en su estómago, asesina al Señor Rubio para salvar a un policía y se desenmascara únicamente frente al espectador como el policía encubierto.

Este suceso genera una sucesión de desconfianzas y lealtades que genera un triángulo de la muerte entre el jefe de la banda, su hijo y el Señor Blanco, que se disparaban, mientras el Señor Rosa se escondía.

La familia que había planeado el robo cae sin vida al piso, mientras el señor Blanco queda gravemente herido tras arriesgar su vida por el Señor Naranja cuando se lo acusaba de ser el policía.

 Tras los disparos el Señor Rosa decide agarrar las joyas y escapar, mientras que el Señor Naranja y el Señor Blanco se quedan juntos cerca de la muerte. De fondo vamos escuchando como la policía atrapa al Señor Rosa, mientras el Señor Naranja le cuenta la verdad al Señor Blanco. Cuando llegan al granero podemos escuchar cómo el Señor Blanco mata al policía encubierto y luego la policía lo acribilla a él.

miércoles, 1 de julio de 2020

En el bosque análisis de lectura

En este relato, en el cual hay varios narradores, creo yo que no hay un relato que sea 100% verdad sino que cada relato tiene partes verdaderas de lo que había pasado y queda en el lector armar la historia del asesinato a través de las distintas historias.

Sin embargo el relato que a mí parecer es el más creíble es el del espíritu del asesinado ya que une los diferentes relatos de los otros 2 protagonistas (el bandido y su esposa) y lo que ocurre fuera de su escena puede recrearse a través de los ojos de los testigos.

A partir de la historia de estos personajes periféricos podemos deducir que Tajomaru no fue el asesino, ya que quien lo encontró no describe la espada como ensangrentada y que la esposa finalmente se queda con el bandido, ya que un testigo los vio juntos a caballo

martes, 30 de junio de 2020

"Limpiando el colegio" anécdota

Elegí como narrador para esta consigna a mí viejo, no necesariamente por la calidad de la narración, pero por lo mucho que disfrute y disfruto de escuchar anécdotas de su juventud.

https://drive.google.com/file/d/1k9uwKOoYosEVySAJzeHnpmyagj1OtN3I/view?usp=drivesdk

viernes, 19 de junio de 2020

Dolina y Lavand

En los videos que se encontraban ajuntados a la consigna se encontraban distintos fragmentos de dos excesos relatores de historias cómo lo son René Lavand y Alejandro Dolina.

El primero, uno de los ilusionistas más reconocidos de nuestro país, que combina su espectáculo de entretenimiento con el arte del relato y la poesía, haciéndolo un arte que llega de mejor manera al corazón de los espectadores.

Cómo todo buen narrador, mantiene un ritmo ameno y pausado, generando una paz que te mantiene en vilo de como seguirá el relato que está esbozando, mientras maravilla con su show de ilusión.

En el caso de Dolina, es un narrador que arma de gran manera la escena del relato, generando que el puente se meta de lleno en aquello que está contando y logra mantener su atención con un lenguaje cotidiano y de fácil comprensión.

A esto se le suman las pausas en los momentos indicados, interesantes reflexiones y explicaciones cuando el momento lo amerita.

Personalmente lo que más admiro es el manejo de la información, como llevan la historia de manera delicada para mantener la expectativa hasta el final del relato, de manera amena y sin esfuerzo, haciendo parecer fácil aquello que no lo es.

lunes, 15 de junio de 2020

Los amigos: núcleos y catálisis

 En ese juego  todo tenía que andar rápido. Cuando el Número Uno decidió que había que liquidar a Romero y que el Número Tres se encargaría del trabajo, Bel­trán recibió la información pocos minutos más tarde. Tranquilo pero sin perder un instante se termino lo que quedaba de su cortado y salió del café de Corrientes y Libertad y se metió en un taxi. Mien­tras se bañaba en su departamento, escuchando el no­ticioso, se acordó de que había visto por última vez a Romero en San Isidro, un día de mala suerte en las carreras. En ese entonces Romero era un tal Romero, y él un tal Beltrán; buenos amigos antes de que la vida los metiera por caminos tan distintos. Sonrió casi sin ganas, pensando en la cara que pondría Romero al encontrárselo de nuevo, pero la cara de Romero no tenía ninguna importancia y en cambio había que pen­sar despacio en la cuestión del café y del auto. Era curioso que al Número Uno se le hubiera ocurrido hacer matar a Romero en el café de Cochabamba y Piedras, y a esa hora; quizá, si había que creer en ciertas informaciones, el Número Uno ya estaba un poco viejo. De todos modos la torpeza dé la orden le daba una ventaja: podía sacar el auto del garaje, estacionarlo con el motor en marcha por el lado de Cochabamba, y quedarse esperando a que Romero llegara como siempre a en­contrarse con los amigos a eso de las siete de la tarde. Si todo salía bien evitaría que Romero entrase en el café, y al mismo tiempo que los del café vieran o sospecharan su intervención. Era cosa de suerte y de cálculo, un simple gesto (que Romero no dejaría de ver, porque era un lince), y saber meterse en el tráfico y pegar la vuelta a toda máquina. Si los dos hacían las cosas como era debido —y Beltrán estaba tan seguro de Romero como de él mismo— todo quedaría despa­chado en un momento. Volvió a sonreír pensando en la cara del Número Uno cuando más tarde, bastante más tarde, lo llamara desde algún teléfono público para informarle de lo sucedido.
         Vistiéndose despacio, acabó el atado de cigarrillos y se miró un momento al espejo. Después sacó otro atado del cajón, y antes de apagar las luces comprobó que todo estaba en orden. Los gallegos del garaje le tenían el Ford como una seda. Bajó por Chacabuco, despacio, y a las siete menos diez se estacionó a unos metros de la puerta del café, después de dar dos vueltas a la manzana esperando que un camión de reparto le dejara el sitio. Desde donde estaba era imposible que los del café lo vieran. Para pasar el tiempo observaba a los pocos peatones que circulaban a esa hora, abrigados al punto de no poder reconocer ningún rasgo facial a causa de la ola polar que acechaba a la ciudad.  De cuando en cuando apre­taba un poco el acelerador para mantener el motor caliente; no quería fumar, pero sentía la boca seca y le daba rabia.
         A las siete menos cinco vio venir a Romero por la vereda de enfrente; lo reconoció en seguida por el chambergo gris y el saco cruzado. Con una ojeada a la vitrina del café, calculó lo que tardaría en cruzar la calle y llegar hasta ahí. Pero a Romero no podía pasarle nada a tanta distancia del café, era preferible dejarlo que cruzara la calle y subiera a la vereda. Exactamente en ese momento, Beltrán puso el coche en marcha y sacó el brazo por la ventanilla. Tal como había previsto, Romero lo vio y se detuvo sorpren­dido. 

-Subite que te están buscando, si entras al café sos boleta.


- ¿Quién me va a estar buscando? ¡Si pase desapercibido toda la vida, Romero! Tanto años sin hablarme y ¿me venís con esta boludez?


- No me hagas arrepentir y subite, no seas boludo. Zafaste, porque sino fuéramos amigos ya te hubiese pegado el tiro.


martes, 9 de junio de 2020

Diarios de escritores

Diario de escritores

Gusmán:
Del análisis de Luis Gusmán hubo dos puntos que me parecieron muy interesantes, el primero es el ideal de sinceridad, en especial la cita de Gombrowicz en la que cuestiona acerca de la sinceridad o insinceridad del diario al mismo tiempo que cuestiona si aquello que se está escribiendo es para uno o para que sea leído o si es hablar con uno mismo para que lo oigan los demás.

Otro de los puntos relevantes de su análisis es la idea de lo íntimo, en la que me pareció significante la cita de Castillo en la que menciona que los diarios íntimos son una farsa y que en ellos hay una esbozada ansiedad por trascender.

De los otros diarios de escritores me gustó el de Robert Misil en el que utiliza el diario para volver a un desarrollo intelectual, luego de años de dispersión, lo que me genera que es algo bien propio e íntimo porque siento que es una vuelta a una práctica a una disciplina que había dejado de lado y que busca reencontrarse a través del diario.

Otro de los que me pareció más naturales y que dan una sensación de más íntimo es el de Ricardo Piglia, a causa del desorden, notas sueltas y frases cortas y sueltas, casi sin conectores en algunas de sus entradas, mezcladas con ideas, pensamientos o situaciones de su vida cotidiana.


Día de lluvia

Entrada del diario 9 de junio de 2020

El sábado pasado tuve que salir a la calle para ir a la farmacia, a diferencia de la típica compra en el supermercado de cercanía o la salida del perro, este es un recorrido más largo y eso me generaba expectativa de poder recorrer un poco el barrio después de tanto tiempo.

Sin embargo, el día estaba lluvioso y, en cualquier otra circunstancia hubiese estado fastidiado salir en un día tan gris. Pero a medida que iba caminando por la vereda mojada, mientras las gotas impactaban sobre mí y sobre mis anteojos y a medida que el aire fresco invadía mí cuerpo, empecé a disfrutar por primera vez de un día de lluvia, no sé si es por el hecho de que salir de mí casa, sin importar el clima, significaba un alivio o si bien la cuarentena está logrando que valore cosas que ya daba por sentado, pero creo que el tiempo dirá si es solo una de las opciones o una convergencia de ambas.

sábado, 6 de junio de 2020

Castillo- Cuento foto

Hacía 3 semanas que estábamos andando por el desierto de Sahara y estábamos quedando sin provisiones y sin energía por los desgastantes rayos de sol que chocaban contra nuestros cuerpos.

A pesar de que cualquiera persona en nuestra situación hubiese emprendido el camino de vuelta, nosotros estábamos empecinados en encontrar aquel castillo del que hablaban todos los pueblos de la región, los pueblerinos no podían dejar de contar acerca de la existencia de aquel mágico castillo y su fuente inagotable de agua rodeada por árboles y frutos.

Solo con pensarlo se nos llenaba de agua la boca, pero ya no teníamos más energía para caminar y la desesperación de lo solitaria que sería una muerte en aquel lugar empezó a inundar nuestro pensamientos.

Cuando toda la esperanza estaba pérdida, mí compañera vio a lo lejos una cúpula y con nuestras últimas energías nos dirigimos hacía allí en la espera de encontrar un pueblo que nos rescate.

A medida que nos íbamos acercando podíamos ver qué no se trataba de un pueblo sino de una sola construcción, tan grande que hacía parecer ínfimo al desierto. Lo habíamos encontrado. Llegamos, exaltados, como si nos hubiesen inyectado la energía por las venas y abrimos las enormes puertas de oro apurados. Paseamos por los hermosos corredores y habitaciones hasta llegar al parque que se encontraba en el punto más lejano de aquel castillo.

El parque era tal cual lo describía la leyenda, y nosotros aprovechamos aquellos frutos, frescos como si el abrumante calor no tuviera efecto en ellos y el agua más pura y natural que habíamos probado.

Antes de salir decidí sacarle una foto a mí compañera para poder mostrarle a los pueblerinos que las historias eran ciertas y que ya nunca más deberían pasar hambre o morir de sed.

Tras un largo camino de vuelta llegamos al pueblo y decidimos revelar las fotos lo más rápido posible, el pueblo estaba expectante por ver aquella foto del castillo que los sacaría de su miseria. Finalmente juntamos a todos y mostramos la foto, las caras de emoción se convirtieron en enojo y desilusión, creían que era una broma de mal gusto, ellos solo veían una chica tirada en la arena del desierto.

martes, 2 de junio de 2020

El desayuno

Entrada de diario 2 de junio de 2020

Hoy, como todas las mañanas, me levante de la cama, me puse las ojotas y me dirigí con un paso adormilado, característico de quien se acaba de despertar, a la cocina para realizar la primera comida del día. Mientras saludo a mis padres y a mi hermano, quienes se levantan mucho más temprano que yo, voy buscando el tazón de melamina blanco que uso para comer los cereales, tras estirarme hasta el tercer estante y agarrarlo, prosigo en dejarlo en la mesada de grafito e ir hacia la heladera.

Al abrir la heladera me inclino hacia ella y busco la leche  que se encuentra en una sachetera verde en el estante del medio y la pongo junto al tazón. Luego agarro el mix de cereales que ya se encuentra en la mesada y vierto lentamente los cereales en el tazón para evitar poner de más, luego agarro la sachetera y la apretó suavemente hasta que el tazón este lleno de leche .

Luego agarro una cuchara cualquiera, generalmente una que tiene un mango verde claro y me aproximo a la mesa con mucho cuidado para no derramar líquido en el camino de un par de pasos entre la cocina y el comedor. Luego me siento en la cabecera y desayuno en soledad, mientras veo en el celular las notificaciones que me llegaron durante la noche o simplemente deslizando mi dedo sobre la pantalla vagamente mientras veo Twitter o Instagram

viernes, 29 de mayo de 2020

Cuento objetos

Lo que pasó fue el tiempo
Objetos: taza, pelota roja y blanca a rayas, moneda escudo de fútbol y muñeco negro sin brazos (no encontré 5 objetos)

Luego de 20 años Leandro volvería a su pueblo natal. El largo viaje en tren desde la capital hasta el pueblo parecía un viaje en el tiempo a aquella primera vez que tomó ese ferrocarril, a medida que veía los grandes campos, las plantaciones de soja y las vacas, le volvían a la mente una cantidad enorme de recuerdos sobre la tierra que lo vio crecer, entre los más felices de estos se encontraba el recuerdo de su infancia cuando jugaban al fútbol  después de la escuela con una pequeña pelota roja y blanca a rayas y el más triste fue el último adiós a sus padres

Al salir de la pequeña de la estación de tren y caminar por las calles de tierra, veía como si todo estuviese igual, como si nada hubiese pasado. Al pasar por la puerta de la escuela a la que atendió durante las primeras etapas de su educación hizo que palpe con su mano el bolsillo derecho de su mochila. Allí era donde estaba siempre guardado el pequeño juguete negro y sin brazos que usurpó en el jardín de infantes y usaba como amuleto de la suerte hasta el día de hoy.

Tras una larga caminata, finalmente llegó a las casa de sus padres, a medida que le daba vueltas a la llave lo invadían la nostalgia y los recuerdos,´pero esperaba con ansias que el perro de sus padres le salte encima para jugar, luego de darle un empujón fuerte a la puerta, como en los viejos tiempos, pudo entrar a la casa de su juventud. Sus padres no estaban allí y tampoco el perro, todo se encontraba como si estuviesen esperando su vuelta, como si nada hubiese pasado. Las sillas del comedor estaban  desordenadas, los platos en la mesa esperando ser lavados, los juguetes del perro desparramados por el piso, las cortinas entreabiertas y la taza tan característica de mi madre al lado de la tetera, esperando a que ella vuelva para llenarse.

De a poco fue acercándose a la habitación donde dormían sus padres y se lanzó sobre la cama, imagino que a ellos no les molestaría que descanse un rato allí. Tras un rato largo esperando a sus padres en la cama logró  observar, sobre la mesa de luz de su padre, la moneda con el escudo de su equipo favorito, llena de polvo, al recordar lo mucho que él la amaba y decidió limpiarla con la manga de su remera, tras frotar la moneda por un rato largo entró en una tristeza absoluta, se dio cuenta que el perro no jugaría con él, que la taza no se llenaría de té y que si había pasado algo, lo que paso fue el tiempo.

miércoles, 27 de mayo de 2020

Nota de lectura "La ley de la vida" de Jack London

En el cuento de Jack London tiene como característica principal el fin del ciclo de la vida, lo inevitable de la muerte para todos los seres vivos y el miedo que esta genera a medida que se avecina, aún sabiendo que es imposible escapar de ella.

La historia del alce entra al relato como un flashback, una memoria de su juventud en épocas de abundancia para la tribu, en la que él, junto a otro integrante de su comunidad, decidieron seguir el rastro de un viejo alce y los lobos que lo acechaban. Creo que el detalle de esta historia es más exhaustiva que la de la muerte del protagonista ya que, debido a su juventud, podía capturar mejor los detalles de la escena que presenció con aquel animal. Con respecto a su propia muerte hay una descripción más vaga, ya sea por su ceguera que menciona anteriormente o porque su misión en la vida había terminado y no había más lugar a detalles.


Esta historia se encuentra en el cuento para hacer un paralelismo entre el anciano y el alce, que ambos se aferran a la vida más allá de que no hay escapatoria de la muerte que se les avecina, ambos fueron dejados atrás por sus pares para que se encuentren con el destino que persigue a todos los seres vivos, esa "ley de la vida", que es la muerte.

Otro punto que llamó mi atención fue la utilización de los objetos de la naturaleza para describir la vida y la muerte. La siguiente cita marca uno de los ejemplos más claros de esta descripción "Hoy como una hoja del último invierno, apenas sujeta a la rama. Al primer soplo me desprenderé". Luego existe una diferenciación constante entre el fuego y el calor, que tiene como significado la vida, el frío, que da lugar a la muerte y las ramas que a mí parecer hacen referencia al aferrarse a la vida, a esas ganas de reavivar el fuego cuando este ya no tiene fuerza para seguir y tiene como único destino extinguirse para darle lugar al frío.